Paul Heyman se robó la pelea central de la primera noche de Wrestlemania
Sí, esto no lo vimos venir.
Si había alguien que no le tenía mucha fe a la Triple Amenaza entre Roman Reigns, Seth Rollins y CM Punk, seguro tras el conteo de tres se tuvo que tragar sus pensamientos.
Sí, porque ni los más de sesenta mil espectadores dentro del Allegiant Stadium de Las Vegas, ni los millones que vimos la primera noche de Wrestlemania 41 a lo largo y ancho del mundo, nos imaginamos el final que tendría esta verdadera batalla, que dejó la historia más que abierta.
Y claro, las cosas parecían muy parejas desde que se anunció y también lo hacía ver de esa manera el público presente en los eventos previos (quizás con la balanza un poquito más cargada a Punk), por lo que el resultado de este sábado asomaba por todas partes como verdaderamente incierto.
Como tenía que ser, cada uno de los protagonistas de esta contienda de cierre del día uno de Wrestlemania tuvo su momento: Primero fue “El mejor en el mundo” que hay que decir que se vio bastante bien; luego fue el turno de "El Visionario" y también el del Jefe Tribal, que tras esta primera ronda se veía con un camino más allanado al triunfo.
Luego hubo intercambio de momentos entre los tres que mantuvieron bien arriba la emoción con cuasi triunfos (o conteos de 2 y medio) para Seth, también para Punk y lo mismo con Reigns, pero de una u otra manera los posibles perdedores se las arreglaban para seguir.
El punto de inflexión vino cuando Rollins intentó convencer a Roman de aliarse para ir contra de Punk e incluso estuvieron a segundos de recordar una de las movidas claves de The Shield y cuando parecía que así sería, el OTC decidió golpear a Rollins, reventar la mesa de comentaristas con la espalda de Punk y finalmente repetir dosis con su ex compañero.
Tras eso, un par de finishers de cada uno para quedar los tres tendidos en la lona y la magistral aparición de Paul Heyman, que como saben estuvo en la esquina de CM Punk, quien acercó una silla al ring y tras titubear un poco se la entregó a Punk lo que parecía sería el triunfo, pero Heyman lo traicionó con golpe bajo para salvar del ataque y entregarle la silla a Reigns.
Y cuando “el sabio” Heyman convence a un repuesto Jefe Tribal de atacar con la silla a Rollins, también lo traiciona con golpe bajo, para dejarle todo en bandeja a Seth Rollins que con silletazo primero y pisotón después terminó quedándose con el triunfo tras el conteo de tres sobre Roman Reigns. In-cre-í-ble.