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[Reseña] Nikoderiko, The Magical World: El regreso a la vieja escuela

Jugamos a este plataformero y así nos fue.

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Hemos hablado antes que en un punto los desarrolladores de videojuegos se extraviaron y solo se dedicaron a realizar títulos tipo libro de historia, prácticamente unas películas para jugar y tan sesudos que, más allá de excelentes gráficas, terminan por precisamente quedar de lado ya que pierden la esencia de la entretención.

Por eso, cuando nos encontramos con videojuegos como Nikoderiko, es que nos gusta darle una oportunidad para regresar a divertirnos junto a nuestra consola solo porque sí, algo que siempre nos han entregado los plataformeros, aquellos que nos invitan a saltar objetos, colgarnos de lianas y golpear a algunos enemigos, además de ir recolectando lo que sea que nos pidan.

Claro, tenemos grandes del género como Donkey Kong, el propio Rayman o Crash Bandicoot que además suma su desplazamiento en profundidad, y por eso es que es bien difícil hacerle el peso inmediatamente a cualquiera de ellos, aunque para pasar un excelente rato es más que suficiente.

Y eso es lo que sucede con Nikoderiko: The Magical World, que nos presenta a Niko, una mangosta humanizada y a su amiga Luna que nos llevarán por varias etapas, todas muy bien diseñadas y bastante coloridas y con buena banda sonora, algo que sin duda suma a la experiencia. En total, nos acercamos a las ocho horas de juego.

En ellas tendremos que saltar para esquivar obstáculos y también enemigos, aunque aquí no contamos con el usual doble salto y a cambio tenemos una especie de pequeño paracaídas de corto alcance que será esencial para dejar atrás rocas más grandes o llegar más lejos cuando lo necesitemos.

Sobre los ataques a los villanos de turno, tenemos la opción de saltar encima de ellos para quitarlos del camino, botarlos con una efectiva barrida, golpear fuertemente el piso para hacerlos volar o bien podemos solo pasar sobre ellos sin darles importancia y quedarán atrás (aquí un punto bajo, porque se hace muy fácil). Aunque habrá otros más grandes que no solo bastará con pegarles en la cabeza, sino que habrá que barrerlos sí o sí o hacer lo de pegarle al suelo.

En el camino además tendremos que ir recolectando ciertos artículos que permitirán ir avanzando, así como también debemos quedarnos con las cuatro letras que forman NIKO para mayores premiosTambién habrá etapas de bonus para recoger estrellas y podremos montarnos en diferentes criaturas para que nos ayuden a llevar de mejor manera nuestro camino, además de permitirnos alcanzar cosas en altura, como en el caso de elegir una rana. Sí, todo muy parecido a Donkey Kong.

Y eso es todo lo que tenemos en Nikoderiko: The Magical World, una aventura extremadamente clásica de los plataformeros que ofrece todo lo usual de este género y lo mezcla en uno solo. Es cierto que podemos hablar de una falta de creatividad total por parte de VEA Games como desarrollador y Knights Peak como editor, pero lo cierto es que se trata de un título que está para eso y que no tiene (al parecer) más pretensiones que solo entregar un buen momento y ya y eso lo cumple.

Yo prefiero quedarme con que Nikoderiko: The Magical World es un buen regreso a los títulos de plataforma que demuestra que no tienes que crear mega historias para entregar un agradable momento. Además, es de un estudio más bien pequeño y se valora que la entrega visual y de sonido esté a la altura de otros más grandes del circuito. 

Además, creo que el videojuego sirve como una buena forma de que generaciones más jóvenes comiencen a interesarse más por este tipo de títulos. El juego ya está disponible para PlayStation 5, Xbox Series, PC vía Steam y Nintendo Switch, que es la plataforma que utilizamos para esta prueba.

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