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[Reseña] Sayen - La Cazadora: El cierre de un ciclo

La primera trilogía de acción nacional ha llegado a su fin.

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Sayen lleva corriendo mucho, mucho tiempo, y al fin podrá descansar: La Cazadora, su tercera y última entrega nuevamente producida por Pablo y Juan de Dios Larraín y Rocío Jadue de Fábula Producciones, fue estrenada el 26 de abril en Prime Video y es la conclusión de todos los hechos que la han llevado hasta este punto.

Esta nueva película comienza exactamente en el mismo punto donde termina la película anterior, La Ruta Seca. Sayen (Rallen Montenegro) está caminando por el desierto y es recogida por sus aliados José (Camilo Arancibia) junto a las hackers Azul (Amalia Kassai) y Lilith (Dindi Jane).

Sus nuevos compañeros de ruta le ayudarán a dar con el paradero de Michael Fisk (Aarón Díaz), dueño de GreenCorp y el jefe final a derrotar para que la verdad salga a la luz y se haga justicia, ya que las acciones de la multinacional ponen en peligro los recursos naturales de todo un país -incluso, de todo el continente-, y eso no se puede permitir ni avalar.

A diferencia de las películas anteriores, en esta ocasión el camino está aún más pavimentado de acción y sangre. En los dos primeros minutos hay tres muertes, y vendrán más. Quizás no todas son necesarias, pero están al servicio de la trama. GreenCorp se caracteriza por no dejar cabos sueltos y Sayen es uno demasiado mediático, potente y escurridizo.

Luego de escapes por azoteas de edificios, persecuciones por la ciudad de Santiago (una protagonista más de esta cinta), otro escape de un edificio pero esta vez en paracaídas, rescates, traiciones y un último escape de edificio en helicóptero, Sayen es capaz de infiltrarse exitosamente en una gala -que se desarrolla en un lugar indeterminado con la fachada del Museo Nacional de Bellas Artes, pero el interior parece una mezcla de locaciones entre el Museo de Arte Contemporáneo y la Biblioteca Nacional- donde dará la última batalla para destapar la corrupción que afecta a todo un Senado y recuperar su honor.

Nuevamente salen a relucir las habilidades del director chileno-estadounidense Alexander Witt en el área de las secuencias de acción (talento demostrado en Resident Evil: ApocalypseNo Time to Die y Terminator Genisys) con coreografías bien ejecutadas y tiros de cámara exhaustivamente planeados, tecnicismos que le dan valor a la cinta.

En esta pasada, lamentablemente, la dirección actoral queda bastante al debe y en segundo plano: el casting secundario no está a la altura del principal y eso quita potencia a varias de las escenas. La intensidad que demuestran ciertos personajes queda más en la categoría de sobreactuación que de drama.

Como conclusión, Sayen: La Cazadora es satisfactoria. Como sus hermanas mayores, ésta también es una película para pasar el rato durante el fin de semana y no se queda atrás en acción y las acostumbradas tomas de dron para establecer el entorno, pero el desarrollo de historia y personajes es poco convincente.

Al igual que en la entrega anterior, aún hay cosas que carecen de explicación y es muy necesario un contexto que, desgraciadamente, no llega.

Lo importante es que Sayen, al fin, podrá descansar en una tierra que ya no será depredada.

Sayen: La Ruta Cazadora estrenó el viernes 26 de abril en Prime Video y está disponible para 240 países en el streaming.

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