M1: El procesador con que Apple busca revolucionar la industria
El gran protagonista del evento fue el cerebro de la nueva línea de Mac.
Con los rumores esparcidos hace días, solo restaba saber si cumplirían con lo señalado en cuanto al evento especial que Apple programó para este 10 de noviembre. Y efectivamente acertaron puesto que los anuncios se centraron en los Mac aunque con la gran novedad de que la línea de este año presenta su primer procesador propio, el que sin duda se robó toda la atención.
Apple Silicon ya estaba en la mente de todos nosotros y hoy en la presentación Tim Cook reveló el nombre del primer chip que estará presente en los Mac Air, Mini y Pro. Hablamos de M1, un procesador que promete ser una verdadera revolución gracias a las prestaciones que entregará a los dispositivos, destacando su potencia que lo ubica un 30% arriba de un computador "normal" con Intel o AMD.
Otros atributos es la optimización de recursos lo que le permite entregar una autonomía hasta ahora no vista en equipos de la compañía (ambos portátiles sobrepasan las 12 horas de uso) y esto es algo que tiene que ver esencialmente con que este M1 está hecho por y para ello. Y quién mejor que uno mismo para sacar el jugo a lo que uno sabe que tiene. Esto es exactamente lo mismo que Apple logra con su iPhone, que no necesita una RAM elevada ni una mega batería para ponerse por encima de varios smartphones con Android (de gama alta, claro). En simple, es lo que hace que una batería de 3.500 mAh alcance casi la misma performance de una de 5.000 mAh.
Y lo anterior se ve complementado por un sistema operativo que, de nuevo, está creado para funcionar con ese chip y sacarle el máximo de provecho. Hablamos de macOS Big Sur, que mantiene la estructura que conocemos de los sistemas operativos de los computadores de Apple y suma la integración de lo propio que corre en iPhone. Esto hace que ambos productos puedan trabajar a la par de una manera aún más eficiente que hasta ahora.
Este Big Sur resulta ser 1.9 veces más responsivo que el sistema operativo anterior y gracias a las Universal Apps permite que todo lo que tengamos en nuestro iPhone pueda funcionar de manera estable, borrando la barrera imaginaria que existía entre ambos productos.
La apuesta de Apple es fuerte así como también las expectativas, por lo que no queda más que esperar a ver cómo es que este nuevo procesador M1 cumple todo lo que promete y cuánto demora en hacer olvidar lo que habíamos visto hasta ahora con Intel en el corazón de los Mac.
