Trabajadores destrozan ensambladora de iPhone por no pago de sueldos
Acusan además extensas jornadas laborales.
Hace un tiempo que Apple fijó en India su interés de ensamblaje de algunos de sus productos y especialmente del iPhone, un mercado que le interesa llegar por dos motivos, primero por su económica mano de obra y segundo por ser uno de los países más grandes del mundo, donde podrían eventualmente “meter con todo” su producto estrella.
Pero el asunto ahora es que una de las plantas ensambladoras del iPhone es propiedad de Wistron Corp, empresa Taiwanesa que es uno de las principales proveedoras globales de Apple, sufrió un ataque masivo de por parte de sus trabajadores quienes acusan condiciones laborales que se acercan a la explotación, sumando diversas faltas a los contratos de trabajo.
Según Reuters, miles de trabajadores se apostaron fuera de las oficinas de la empresa y ante la llegada de la policía respondieron violentamente arrasando con parte de las instalaciones, causando daños por 60 millones de dólares, según estimó la propia Wistron.
Ante la situación, Apple explicó vía comunicado que cuentan con “equipo en terreno e iniciaremos de inmediato una investigación detallada en las instalaciones de Wistron en Narasapura”, además de asegurar que está por garantizar que todos los trabajadores que tengan que ver en la cadena de suministro de sus productos, sean tratados con dignidad y respeto.
Por su parte, la empresa se mostró “profundamente conmocionada por la violencia que atribuyó a personas desconocidas y con intenciones poco claras”. Además, declararon que “siempre cumplen con la ley y apoyan plenamente y están cooperando con las autoridades pertinentes”.
Sin embargo, Wistron acusó a más de cinco mil trabajadores y dos mil personas desconocidas de destrucción de propiedad que incluye cuatro autos, dos carritos de golf y equipos de oficina, además del robo de computadoras portátiles y teléfonos móviles inteligentes.
En tanto, las condiciones señaladas por los trabajadores incluye el no pago de sueldos desde hace cuatro meses, además de la obligación de cubrir horas adiciones, esto por el alto volumen de pedidos que ha hecho Apple, así como también el notorio recorte de salarios que sobrepasaría el cincuenta por ciento.