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Las razones de por qué el Galaxy Z Flip5 barre con su competencia

No todo está a la vista.

SuperGeek en Seúl.- El Galaxy Z Flip5 acaba de ser presentado e inmediatamente saltan las comparaciones con otras opciones disponibles en el mercado, lo que obviamente resulta lógico al ser productos similares, pero más allá de la parte estética, si vamos al interior es donde nos encontramos con las diferencias y por eso es importante dejarlas bien claras.

Si bien nos vamos a centrar en lo que sucede en Chile, igualmente no podemos dejar de nombrar rápidamente al OPPO Find N2 Flip que llegó mundialmente a inicios del año pasado destacando por su pantalla externa, pero la firma china lo dotó de un procesador DImensity 9000+ de MediaTek que si bien corresponde a uno de gama alta, no tiene cómo competir con el más potente de Qualcomm. Quizás la nueva versión (si es que la hay) venga mejorada y así pueda competirle al surcoreano.

Aclarado el punto, los focos nos llevan hacia el moto Razr 40 Ultra, el plegable de Motorola que acaba de presentarse en Chile y que de manera inmediata asombra con una pantalla externa bien grande, más que la del Galaxy Z Flip5, y colores llamativos. Es un dispositivo que, al parecer, aprendió de los errores de su versión y media anterior y ahora busca quitarle público a la nueva apuesta de Samsung.

Sin embargo, tenemos que irnos más a fondo y ahí es la potencia del equipo la que entra a jugar y es donde, vaya importancia, el surcoreano saca grandes ventajas porque el chino moto Razr 40 Ultra ofrece un procesador de hace un año (Snapdragon 8+ Gen 1), que incluso actualmente puede encontrarse en equipos que cuestan 600 mil pesos. Y el de Samsung, en cambio, cuenta con el procesador más potente de la actualidad, sin olvidar que la versión del procesador al ser For Galaxy, está optimizado para utilizarse con su software, lo que nos asegura un mejorado uso de la batería que entrega más autonomía, en el resultado de sus fotografías y finalmente en el rendimiento, lo que se traduce en años de buen uso.

Precisamente hablando de años es donde el plegable clamshell de Samsung vuelve a golpear fuerte puesto que ofrece al menos cuatro años de actualizaciones de sistema operativo, lo que nos asegura llegar hasta Android 17 versus los dos años que ofrece Motorola. Tenemos que considerar que comprar un plegable significa una alta inversión monetaria, por lo que claramente es una enorme ventaja saber que no tendremos que pensar en cambiar el equipo cada veinticuatro meses o poco más.

Otro resultado importante tiene que ver con las cámaras y aquí Samsung si bien apuesta por un par de lentes de 12MP que pueden sonar muy bajos en comparación a la competencia, cuenta con el alabado modo Nightography que permite resultados asombrosos en condiciones de poca luminosidad, mejores que el Razr 40 Ultra, y un video muy estable que ya es una característica de Samsung, sobre todo en sus gamas altas. Y en fotografía general, el resultado será mejor gracias al trabajo que realizar el procesador, tal como lo comentamos más arriba.

Cerramos con protección IPX8 que permitirá que el equipo pueda soportar caídas en agua dulce de hasta un metro y medio de profundidad y por un tiempo máximo de media hora e incluso puede tomar fotografías bajo agua, aunque igualmente no es algo que nosotros recomendemos. 

Sabemos que el precio es algo importantísimo en la elección de un nuevo smartphone y sobre todo si hablamos de una inversión alta como significa un dispositivo flexible, pero al momento de publicar esta nota lo que cuesta el Galaxy Z Flip5 es incluso diez mil pesos menos que el Razr 40 Ultra y si bien podría ser normal que el plegable de Motorola baje algo de precio para hacer frente a la llegada de la apuesta de Samsung, con todo lo que ya les comentamos más arriba, incluso pagando unos pocos pesos más, lo más conveniente sería inclinarse por el Galaxy Z Flip5. La decisión se explica por sí sola.