Lucha Libre

Bad Bunny tuvo que recurrir a sillas, palos y basureros para ganar su lucha en WWE

Una de las luchas más esperadas de esta jornada de Backlash, el evento de WWE que tuvo a Puerto Rico como su casa por segunda vez en la historia, era el de Bad Bunny contra Damian Priest, la superestrella puertorriqueña que fue la pareja del cantante en su ganador debut en la compañía de lucha libre hace dos años.

La estipulación era una lucha callejera, lo que quiere decir que no existen elementos prohibidos para quedarse con el triunfo, es decir, valen mesas, sillas, basureros, palos de kendo y todo lo que se les pueda ocurrir para tumbar al rival y lograr el conteo de tres.

Y precisamente varios de esos elementos fueron utilizados por Bad Bunny para ablandar a su rival, el que obviamente es completamente superior no solo en movimientos, sino que también en fuerza, lo que le permitió incluso haber podido quedarse tempranamente con el triunfo (no más de dos minutos desde que sonó la campana), pero él mismo fue el que levantó la espalda del cantante para que no acabara aún la lucha.

De ahí en más golpes de lado y lado hasta que el conejo malo tomó el control del desafío castigando fuertemente la pierna derecha de su rival con sillas, cadenas y palos de kendo y cuando se disponía a castigar de manera definitiva a Priest, aparecieron Finn Bálor y Dominik Mysterio para lanzarse contra el conejo y dejarlo listo para que el integrante de Judgment Day se quedara con el triunfo.

Sin embargo, la arena explotó cuando salió Carlito, un reconocido luchador puertorriqueño que tuvo gran éxito años atrás en la WWE y luego fue el turno de Rey Mysterio y no solo eso ya que también apareció el mítico Savio Vega y el resto de LWO para alejar a Bálor y Dominik. Una paliza latina.

Con el ring despejado y Priest con problemas en una de sus rodillas, Bad Bunny terminó la fiesta merced a dos reconocidos movimientos, siendo la Canadian Destroyer la que le entregó el lucido triunfo que fue vitoreado con fuerza por todo el coliseo, con más de dieciséis mil asistentes.

Este nuevo capítulo de Bad Bunny en el ring de la WWE volvió a dejar buenas impresiones pero no solo por la buena ejecución de varios movimientos de una dificultad media a alta, sino que también porque fue capaz de recibir castigo con elementos (un par de palos de kendo y un basurero) y sobre todo una caída desde la altura que le significó romper un par mesas con su cuerpo.