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[Análisis] Lenovo X1 Fold: A veces es mejor esperar

La tecnología de pantallas plegables está avanzando rápidamente especialmente en los teléfonos móviles, donde ya existe disponibilidad de varios equipos a nivel mundial e incluso en nuestro país podemos encontrar cuatro modelos que se venden de manera oficial. Como hemos dicho antes, aún mantienen precios muy altos y su performance sigue en vías de consolidación.

Ahora bien, Lenovo fue la primera en atreverse con un equipo portátil con esta característica, un notebook cerrado tal y como los conocemos pero al abrirlo, se despliega un todo pantalla que obviamente llama la atención pero tras utilizarlo por algunos días, es algo que no pasa de eso. A continuación les contamos qué nos pareció el Lenovo X1 Fold.

De partida impresiona por su pantalla táctil plegable OLED de 13.3 pulgadas con resolución 2K y también le da una sensación aún más premium la parte trasera con acabado en símil cuero. El mismo estuche permite guardar además un teclado físico y el stylus, que permite tomar apuntes, pero lamentablemente nunca como sería con un iPad, por ejemplo. A ver, claro que es bueno que lo incluya, pero aún siento que está por estar, no se justifica, por el momento.

También destaca la certificación militar MIL-STD 810G (muy usual en los dispositivos portátiles de LG) y que creo se justifica porque es un equipo que a nadie le gustaría exponer a accidentes y esto le entrega una mayor protección. Su material de construcción está hecho de magnesio y fibra de carbono, por lo que su grosor extremo se suple con un peso más que aceptable.

Su hardware se compone de un Intel Core i5 con 8GBRAM y almacenamiento de 256GB en SSD, al menos en la unidad que probamos, ya que existe versiones con 512 y hasta 1TB de almacenamiento. El último bluetooth está (5.1) y también WiFi 6, por lo que por conectividad no se queda atrás. Y tampoco en cuanto a autonomía, ya que nos entregó casi diez horas de uso, lo que es bastante bueno. Tiene además altavoces Dolby Audio y una webcam de 5MP muy necesaria para las ya normales videollamadas.

Pasando a la bisagra, es algo que Lenovo ejecutó muy bien puesto que trabaja a la perfección, no es dura, no cuesta doblarlo, no hace ningún tipo de ruido y lo mejor de todo es que no entrega esa sensación de que se podría quebrar en cualquier momento. Se nota durable y sí hay que utilizar las dos manos para plegarlo.

Ahora bien, teniéndolo completamente estirado, nos encontramos con bordes sumamente gruesos que apagado pareciera que es una tablet de un par de años atrás. Todo se resuelve al encederlo gracias a la definición de sus imágenes y la correcta ejecución de colores, no por nada hablamos de tecnología OLED.

Los problemas comienzan al momento de ocupar el equipo ya que es un Windows que no está preparado para cambios drásticos de uso (es como pasar al modo tablet) y el equipo no ejecuta bien dichos cambios ya que se toma un par de segundos para readaptarse y en un equipo de estas características la verdad es que resulta imperdonable. También se extraña una suite de aplicaciones que estén "transformadas" para este formato, pero tampoco podemos pedirle tanto a algo que acaba de lanzarse y que incluso Apple con su ya "vieja" iPad recién comenzó a solucionar este año.

Se entiende que es la primera experiencia de este tipo, pero Windows no está preparado para este equipo y dificulta la experiencia. Son cosas más que salvables, lo sé, pero nuevamente lo mismo: un equipo de este rango de precio es algo que no se puede permitir. Qué decir de las tareas más potentes, simplemente no da. Hay que olvidarse de jugar siquiera en modo medio a los más populares del momento, pero sé también que este no es el foco. También cuando se le sacó el jugo, noté que se calentaba en exceso. Si lo quieres para un uso diario, con la suite de office y quizás un par más de programas, no hay problema, pero no más.

El problema, creo, pasa porque está en el medio de algo ya que no es tablet, tampoco celular, menos un computador, sino que intenta ser todo en uno, pero la experiencia aún no cuaja bien. Una Galaxy Tab 6+, que es el mismo caso pero al revés (un tablet que se quiere creer laptop) funciona varias veces mejor y cuesta la mitad, por lo menos. Lo mismo ocurre con un iPad, que además de trabajar mejor, puede sentirse más robusto por el concepto de ecosistema. Ante esto el Lenovo X1 Fold debe tener en qué apoyarse y lamentablemente no es así, repito, por el momento.

Para no sonar extremadamente negativo, debo decir que usar un computador de este modo, en un mundo en que las pantallas táctiles nos acompañan prácticamente todo el día, es algo muy cómodo y seguro será el futuro. Pero para eso falta bastante y si bien este Lenovo X1 Fold es el primero en su especie, hay mucho por mejorar y avanzar. Y ante eso, pagar 2.7 millones de pesos chilenos por tecnología que aún no funciona del todo bien parece un exceso. Por eso a veces es mejor esperar.