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[Especial 5G] Samsung Galaxy FE21: Su competencia es interna

Somos el primer medio en Chile en probar el último smartphone surcoreano y esto nos pareció.

Corría la segunda mitad de 2020 cuando Samsung nos tomó por sorpresa con el lanzamiento de un nuevo teléfono que prometía ser el resultado de la opinión directa de los usuarios de la marca, o más bien de los fanáticos, pues ese precisamente fue el empuje para el nombre del dispositivo: Fan Edition.

Acompañado de una gran campaña publicitaria (algo muy normal en Samsung) que incluyó primero la instalación del concepto “Fan Edition” y segundo a la banda coreana BTS con su hit “Dynamite”, el S20 FE se convirtió en un éxito de ventas merced a lo que ofrecía y principalmente a su precio, que en realidad hacía sentir que estabas comprando un gama alta por mucho menos dinero que el normal.

Por todos estos motivos es que la versión 21 de esta serie era muy esperada pero lamentablemente no llegó cuando debía producto de la pandemia, la falta de stock de componentes y quién sabe qué más, por lo que recién pudimos conocer este equipo recién iniciado el 2022 y en el retorno presencial a CES, luego de un año virtual, y quizás ese es el mayor problema que tiene este smartphone.

Sí, porque nada podemos decir en contra de lo sustancial, pues Samsung vuelve a repetir la fórmula entregándonos un “gama alta recortado” que cuenta con un procesador Exynos 2100 para este lado del mundo (en las partes de siempre lleva Snapdragon 888), versiones de 6GB y 8GB de RAM y opciones de 128GB y 256GB de almacenamiento interno.

Como pantalla tenemos una ya acostumbrada espectacular Dynamic AMOLED 2X de 6.4 pulgadas, con resolución FullHD+ y tasa de refresco a 120Hz, batería de 4.500mAh con carga rápida de 25W y también inalámbrica de 15W. Además suma carga inversa para que en su espalda de plástico y en terminación mate (solo los bordes son de aluminio), apoyemos audífonos y hasta otro teléfono para cargarlo.

Aquí hay un punto negativo y es que los 120Hz de refresco no son dinámicos, por lo que quedan activos siempre y ahí claramente la autonomía del equipo es la que sufre. Lo más recomendable para este caso es dejarla siempre en 60Hz y solo subirla al doble cuando vamos a leer algo o a ponernos a jugar, pero para todo lo demás es innecesario.

Si seguimos ese consejo, no habrá problema alguno que el dispositivo sobrepase el día y medio de uso (claro que no tan intensivo) lo que ubica al Galaxy S21 FE en el promedio de los equipos actuales. No es poco, tampoco mucho, por lo que está bien.

Hay un avance en cámaras pues a la principal de 12MP con un certero estabilizador y a la gran angular de 12MP con apertura de 2.2 se suma ahora una Teleobjetivo de 8MP que permite un zoom óptico de tres aumentos. Además, esta misma permite tomar fotografías a corta distancia con un resultado mucho mejor que otros teléfonos que incluyen la muy usada pero poco práctica cámara macro.

Lo que entregan las fotografías tomadas es muy bueno para lo que dice ofrecer y pareciera que son cámaras con un sensor mayor pero “recortadas” por software para solo entregar un máximo de 12MP. Esto se nota sobre todo porque los bordes de la imagen son bien definidos y no muestra esa especie de disolución que es muy común en los equipos de gama media.

Cae en las fotografías tomadas de noche o con poca luminosidad, pero como he dicho en varias oportunidades, ese no debería ser un factor para elegir un teléfono. Pero como en gustos no hay nada escrito, si son de los que se entretienen con la captura de imágenes con poca luminosidad, para este teléfono es recomendable activar el modo noche. Es cierto que los colores se sobre exponen un poco, pero el resultado es mucho más aceptable que sin esta función activada.

Ahora bien, si quieres grabar video en 4K a 60FPS, entonces lo mejor es que sea de manera estática y mejor aún si es con un trípode, puesto que la imagen se mueve bastante al caminar. Podría solucionarse también con algún accesorio del tipo Osmo de DJI o similar. Eso sí, la cosa mejora si se graba en 4K a 30FPS.

Tiene todo lo demás que debe tener un equipo de su nivel, lector de huella en pantalla (muy rápido), desbloqueo facial (no tan certero como otros incluso de la misma marca), protección IP68, 5G, una cámara delantera de 32MP de muy buenos resultados y NFC, por lo que también viene listo para el pago de compras a través del celular, algo que este año debería masificarse en nuestro país.

Este Galaxy S21FE es un equipo completo y bastante redondo y cuenta con las mejoras justas para diferenciarse de su versión anterior, pero nada por lo que volverse loco. Por eso, el equipo no es recomendable para saltar del equipo del año pasado y por el contrario, sí lo es para quien quiere saltar de la serie Galaxy A o desde otra marca, por ejemplo. Si son fanáticos de la marca y tienen el dinero, entonces a ojos cerrados.

Y hablamos de dinero porque efectivamente es un equipo bastante más costoso que el año pasado, comenzando en los $729.990, algo que termina siendo una traba y de paso agiganta a otras opciones que da el mercado. Más de alguno pensará en que Xiaomi cuenta con equipos 5G desde los 200 mil pesos o quizás un poco menos, pero por construcción y sobre todo software, los equipos de Xiaomi aún no pueden compararse con los de Samsung y eso es una realidad.

Donde sí tiene una competencia y muy fuerte es con sus propios hermanos de serie y ahí es el problema más grave en todo esto pues ahora es posible comprar un S21+ por casi cien mil pesos menos que es un gama alta de tomo y lomo. ¿Otra zancadilla? En dos semanas más se presenta la serie S22.