[Reseña] Paper Mario: The Thousand-Year Door: Sí, anda a jugarlo
Jugamos a la aventura de papel y así nos fue.
Si no está malo, no lo arregles y eso es lo que se siente con este Paper Mario: The Thousand-Year Door que debutó hace veinte años (sí, cómo pasa el tiempo) en la Game Cube y que ahora Nintendo tuvo la genial idea de traer de regreso a la Switch dejando la experiencia original y solo retocando gráficamente el juego.
Y bien, podríamos hablar largo y tendido sobre la versión de 2004, pero la idea que tuvo Nintendo no fue traerlo de regreso para los que éramos niños o adolescentes en ese tiempo, sino que lo hizo para seguir encantando a las nuevas generaciones con este personaje y todos sus amigos que se aventuran en Rogueport hasta donde llega para salvar a la princesa.
Porque sí, en esos años la motivación de Mario no era otra que ir al rescate de una desamparada Peach, algo que sabemos que en la actualidad no sucede y bien claro nos lo dejó Super Mario Bros.: La Película y también Princesa Peach: Showtime, el propio videojuego de la líder de los Toads.
En Paper Mario: The Thousand-Year la princesa desaparece con el mapa de un tesoro oculto que promete las más increíbles maravillas y es Mario el que emprende el viaje para encontrarla topándose con varios enemigos que le harán sacar sus mejores movimientos para dejar atrás y seguir avanzando, porque claro, estamos hablando de un RPG de tomo y lomo.
El bigotón tiene que conseguir toda la ayuda posible para lograr el rescate y en ese camino se cruzará con varios amigos a los que podrá requerir según la necesidad; por ejemplo, si necesita cruzar un precipicio podrá recurrir a Yoshi para que lo lleve sobre él. Y cuando le toque enfrentar a alguien solo, tendremos que usar el arma correcta para derrotar al malvado de turno.
A lo largo de los ocho capítulos nos encontraremos con una atractiva historia que de verdad por varios momentos nos atrapa y solo queremos seguir avanzando para ver qué sucede. Y eso es lo mismo que pasaba con la versión original del título, lo que se mantiene y para quienes venimos de aquella, todo esto será un empuje hacia el pasado. Nostalgia pura.
Claro, la historia y la jugabilidad no se toca, pero el juego sí se refresca con nuevos gráficos que hacen notar la diferencia entre una consola y otra (en el dock se juega a 1080p y en mano a 720p) y también hay nueva música que acompaña de gran manera esta historia. Aunque para los más fanáticos, la banda sonora original también está disponible y se puede obtener cumpliendo ciertos requisitos dentro del juego.
De igual manera hay nuevos NPC´s con los que se puede tener cierta interacción, también otras animaciones que no las vimos en la GameCube y finalmente algunas sorpresas extras que las vamos a dejar tal cual para que jugando las descubran. Y todo esto es más que suficiente para lograr un título bastante redondo.
Así, Paper Mario: The Thousand-Year de Nintendo Switch logra reencantar a aquellos que lo jugaron varios años atrás y se presenta lo suficientemente interesante para que aquellos que recién lo conocen ahora vayan a comprarlo, porque es altamente recomendable. En la Switch Store Online está a un precio de $58.990.