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[Reseña] "Titans" - Temporada final: Mucho de unos, poco de otros

La recién estrenada temporada de "Titans" en Netflix -en Latinoamérica y UK, porque en EE.UU. se estrenó en dos partes (la primera en noviembre de 2022 y la segunda en abril de este año) a través de HBO Max- es definitivamente la última y llega justo a tiempo para cerrar las tramas que estaban pendientes y dar pie al nuevo multiverso live-action de DC.

El grupo liderado por "Dick Grayson – Nightwing" (Brenton Thwaites) deja atrás Ciudad Gótica y, por invitación de "Superman", se dirige a Metrópolis para que "Conner Kent - Superboy" (Joshua Orpin) al fin conozca a uno de sus "padres" genéticos.

Desgraciadamente, los deberes del Azuloso con la galaxia le impiden llegar a la cita, pero en esta parada "Conner" sí conoce a su otro "padre", el multimillonario "Lex Luthor" (Titus Welliver), quien, en su afán de adueñarse de un poder sobrenatural, desata el caos y la amenaza de esta temporada: La Organización (sí, ¡otra vez!), encabezada por sus nuevos representantes "May Bennet – Mother Mayhem" (Franka Potente), ferviente seguidora del culto a "Trigon" y "Sebastian Sanger - Brother Blood" (Joseph Morgan), un programador de videojuegos que, como némesis, no parece tener sus motivaciones malvadas muy claras.

Así, los "Titanes" vuelven a su inicio para presentar su final: detener la vuelta de "Trigon" (Seamus Dever) a la Tierra, completando el círculo de la historia central de los primeros episodios y justificando el propósito de "Kory Anders - Koriand’r - Starfire" (Anna Diop) en nuestro planeta, poniendo a "Starfire" en el foco del protagonismo. Nada malo, pero si de nuevo van a luchar contra "Trigon", la lógica indica que "Rachel Roth - Raven" (Teagan Croft) debería hacerlo y, pues, no. A pesar de pasar por una gran transformación, Raven queda en las sombras de la narrativa.

La historia es confusa, lenta, anecdótica y, hacia el final, demasiado rápida. Como cierre, se nota apresurado y que trataron de apretar la mayor cantidad de contenido posible en 12 episodios como, por ejemplo, la introducción de "El Rojo" y "El Verde" (las fuerzas y conexiones espirituales con toda vida animal y vegetal, respectivamente. Son lo que da pie a la conexión interdimensional que produce el evento "Crisis en las Tierras Infinitas" ya visto en el Arrowverso) se siente fuera de lugar en medio del relato mágico.

Pero, gracias a eso, "Garfield Logan - Beast Boy" (Ryan Potter) al fin entiende su propósito como superhéroe y se agradece que disfrute aunque sea un episodio dedicado a su personaje, ya que la serie sigue gozando de la mala costumbre de enfocarse casi exclusivamente en "Nightwing" y "Starfire", dejando al resto del equipo en segundo plano.

En cuatro temporadas conocimos a tres "Robins": un maduro, "Dick Grayson", que colgó la capa para ser "Nightwing"; el joven e inestable "Jason Todd" (Curran Walters) que se desafilió de "Batman"/"Titans" para ser "Red Hood"; y el entusiasta "Tim Drake" (Jay Lycurgo), quien, desgraciadamente, queda atrapado en el escaso tiempo de vida que le queda a la serie y no alcanza a adoptar y construir su alter ego de la manera apropiada.

No logra brillar por si solo en el traje de la avecilla petirroja hasta los dos últimos capítulos, lo que es una real pena, ya que, en palabras de "Jason Todd", "él será un mejor Robin que yo” y, con el nuevo Multiverso DC, es posible que no le veamos más (al menos, no esta versión).

El desenlace es anodino, esperable (por supuesto, está basado en historietas, pero aun así se extraña cierto nivel de factor sorpresa) y definitivamente agridulce.

Una batalla final sin ganas y poco despliegue heroico, la Tierra finalmente (¿?) a salvo y una fría cena final a modo de despedida, donde cada miembro de los "Titanes" revela qué hará luego de algo tan común como salvar al Universo, el grupo se separa. Así, sin más.

Definitivamente, la temporada podría haber sido mucho mejor, pero da la impresión de que producción y guionistas se rindieron al saber que era la última. Menos mal que vestuario no decepcionó con los trajes, que siempre estuvieron a la altura al igual que el casting, porque vaya que hicieron maravillas de interpretación con ese guion.

Las cuatro temporadas de "Titans" están disponibles en Netflix en Latinoamérica.